Transformadores más ‘sanos’, gracias a un mantenimiento rediseñado
IK4-TEKNIKER ha innovado en la aplicación de un sistema de diagnóstico integral de fallos y averías en trasformadores eléctricos denominado Mantenimiento Basado en la Función para maximizar la vida útil y la eficiencia de los dispositivos.
En el campo de los transformadores eléctricos, como en todas las áreas de la actividad industrial, el mantenimiento es un servicio vital para el funcionamiento correcto de la maquinaria, la reducción de costes y la seguridad en el trabajo.
Por eso, IK4-TEKNIKER ha desarrollado un innovador sistema de diagnóstico integral de fallos y averías en transformadores eléctricos, llamado Mantenimiento Basado en la Función, diseñado a partir de la demanda principal que los investigadores del centro tecnológico han detectado en las empresas: un sistema que permita recoger más información y, por lo tanto, maximizar la vida útil y la eficiencia de los dispositivos.
Dado que las normas internacionales tratan los análisis físico-químicos, de gases disueltos y de derivados furánicos por separado, el mantenimiento que suele llevarse a cabo normalmente en las empresas suele perder información muy valiosa para el diagnóstico global del transformador.
Resultados integrados
Para solucionar este problema, el sistema de Mantenimiento Basado en la Función integra los resultados de los análisis de todos los subsistemas de un transformador, interpreta los resultados teniendo en cuenta la misión de cada componente y diagnostica el estado del dispositivo reconociendo los fallos específicos de cada uno de los componentes.
Este innovador sistema parte del hecho de que los aislamientos líquido y sólido constituyen una parte integral del transformador y no un mero elemento auxiliar, ya que éstos desempeñan un papel dinámico en el estado de todo el sistema. Gracias a este cambio de concepto, el método ingeniado por IK4-TEKNIKER presta una atención más precisa y eficaz al estado general del transformador.
Los transformadores constituyen un recurso vital en los procesos de generación, transporte, distribución y utilización de la energía eléctrica, por lo que, a pesar de la escasa atención que suelen atraer por parte de los responsables de mantenimiento, son un componente ubicuo en las instalaciones industriales que demanda un cuidado específico.